Se está produciendo en Catalunya y España un auténtico alud de casos de supuesta corrupción política. No pasa día sin desagradables noticias en este frente. La gravedad de lo que se va conociendo se ve ineludiblemente amplificada por la terrible situación económica y social. La gente no solo se siente cansada y desilusionada, sino muy enfadada. Cabreada. Es este un problema que interpela directamente a nuestros políticos. Ellos son los protagonistas de los escándalos, pero, al mismo tiempo, son quienes más pueden hacer para combatir el problema. Por ejemplo, actuando cuando en sus filas se produce un caso de corrupción. … Continuar llegint