Ni el peor de sus enemigos puede negar que Donald Trump es un tipo disruptivo, incluso revolucionario, en la manera de hacer política. Lo fue ya en su primer mandato, pero lo está siendo mucho más ahora. Algunos observadores han apuntado a la ‘teoría del loco’, un concepto inspirado por la figura de Richard Nixon, para intentar dar sentido al comportamiento trumpiano. La teoría del loco nos advierte del poder que gana aquel que consigue que su interlocutor crea que es capaz de cualquier cosa. Que no está sujeto al cálculo racional de ganancias y pérdidas. Que todo le importa un pepino. Tener a … Continuar llegint